viernes, 31 de enero de 2025
IV DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Lecturas de
la Presentación del Señor
Primera Lectura
Lectura del libro de Malaquías (3,1-4):
Así dice el Señor: «Mirad, yo envío
a mi mensajero, para que prepare el camino ante mí. De pronto entrará en el
santuario el Señor a quien vosotros buscáis, el mensajero de la alianza que
vosotros deseáis. Miradlo entrar –dice el Señor de los ejércitos–. ¿Quién podrá
resistir el día de su venida?, ¿quién quedará en pie cuando aparezca? Será un
fuego de fundidor, una lejía de lavandero: se sentará como un fundidor que
refina la plata, como a plata y a oro refinará a los hijos de Leví, y
presentarán al Señor la ofrenda como es debido. Entonces agradará al Señor la
ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, como en los años
antiguos.»
Palabra de Dios
Salmo
Sal 23
R/. El
Señor, Dios de los ejércitos, es el Rey de la gloria.
Segunda Lectura
Lectura de la carta a los Hebreos (2,14-18):
Los hijos de una familia son todos
de la misma carne y sangre, y de nuestra carne y sangre participó también
Jesús; así, muriendo, aniquiló al que tenía el poder de la muerte, es decir, al
diablo, y liberó a todos los que por miedo a la muerte pasaban la vida entera
como esclavos. Notad que tiende una mano a los hijos de Abrahán, no a los
ángeles. Por eso tenía que parecerse en todo a sus hermanos, para ser sumo
sacerdote compasivo y fiel en lo que a Dios se refiere, y expiar así los
pecados del pueblo. Como él ha pasado por la prueba del dolor, puede auxiliar a
los que ahora pasan por ella.
Palabra de Dios
Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio según san Lucas
(2,22-40):
Palabra del Señor
sábado, 25 de enero de 2025
JORNADAS DE CARITAS
EN VIERNES SE ORGANIZARON EN LAS PLAZA SAN RAFAEL UNAS JORNADAS DE INFANCIA, CONECTANDO SABERES Y SONRISA.
ORACIÓN DEL FIN DE SEMANA. HIGINIO
Se nota, Señor, que escuchabas y meditabas la Palabra de manera continua y frecuente. No eras un creyente de los de vez en cuando. Escuchabas y meditabas con disciplina y atención. Ibas abriendo tu corazón a esa Palabra, y desde ella, ibas interpretando la voz del Padre, con quien estabas eternamente unido. Tu humanidad se forjó en la escucha, de tal manera que cuanto oías te lo aplicabas. No seleccionabas de la Palabra sólo lo que te gustaba, ni te dejabas llevar por la lectura interesada de los de tu pueblo. Leías con libertad y con disponibilidad. Cuánto me gustaría, Señor, que esa misma manera tuya, yo la tuviera en mi vida de creyente. Que tu Espíritu me ayude a acoger tu Palabra en la totalidad de tu propuesta salvadora, y a disfrutar de la libertad de esa Palabra. Has venido a ofrecer gracia y consuelo, a recomponer lo que está a punto de romperse, o se ha roto, a dar una nueva oportunidad al que fracasa. A ofrecer un perdón a quien lo desea recibir y un camino de justicia y caridad a quien lo quiera recorrer. Viniste a abrir con tu persona un jubileo continuo y permanente, con una puerta siempre abierta en cualquier etapa de la vida. Tu Palabra abre ventanas a quien está encerrado en las cuatro paredes de sus problemas; permite caminar a quien se ha acostumbrado a la parálisis de la comodidad, o lo que creen ya imposible; calma el dolor de lo que han sido castigados por la vida; abre la mente al misterio en aquellos que todo lo quieren medido y razonado. Tu Palabra invita a la esperanza, fortalece la fe, y hace nuevo y creativo al amor. Tu Palabra activa las potencias del alma: es memoria viva que sale al paso de los acontecimientos; es entendimiento que ayuda discernir lo que Dios quiere en cada momento; es voluntad que nos empuja a una acción fecunda y misionera. La escucha atenta y orante de tu Palabra, Señor, me hace creyente con fundamento. Dame la gracia de no renunciar a su escucha y la humildad de ser siempre un aprendiz.
CATEQUESIS DE PREPARACIÓN AL MATRIMONIO
EN LA MAÑANA DE ESTE SÀBADO 24 de ENERO, SE HA CELEBRADO LA CATEQUESIS DE PREPARACIÓN AL MATRIMONIO A LAS PAREJAS QUE PRÓXIMAMENTE VAN A DAR EL SÍ A UN COMPROMISO DE VIDA CRISTIANA.”LO QUE DIOS UNE QUE NO LO SEPARE EL HOMBRE”
EL LUGAR DE ENCUENTRO FUE EN LA PARROQUIA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD DEL TABLERO.
¡FELICIDADES A TODOS !
viernes, 24 de enero de 2025
LECTURAS DEL III DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Primera Lectura
Lectura del libro de
Nehemias (8,2-4a.5-6.8-10):
El escriba Esdras se puso en
pie sobre una tribuna de madera levantada para la ocasión.
Esdras abrió el libro en
presencia de todo el pueblo, de modo que toda la multitud podía verlo; al
abrirlo, el pueblo entero se puso de pie. Esdras bendijo al Señor, el Dios
grande, y todo el pueblo respondió con las manos levantadas:
«Amén, amén».
Luego se inclinaron y adoraron
al Señor, rostro en tierra.
Los levitas leyeron el libro
de la ley de Dios con claridad y explicando su sentido, de modo que entendieran
la lectura.
Entonces, el gobernador
Nehemias, el sacerdote y escriba Esdras, y los levitas que instruían al pueblo
dijeron a toda la asamblea:
«Este día está consagrado al
Señor, vuestro Dios: No estéis tristes ni lloréis» (y es que todo el pueblo
lloraba al escuchar las palabras de la ley).
Y añadieron:
«Andad, comed buenas tajadas,
bebed vino dulce y enviad porciones a quien no tiene, pues es un día consagrado
a nuestro Dios. No estéis tristes, pues el gozo en el Señor es vuestra
fortaleza».
Palabra de Dios
Salmo
Sal 18,8.9.10.15
R/. Tus palabras, Señor, son
espíritu y vida.
V/. La ley del Señor es
perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R/.
V/. Los mandatos del Señor son
rectos
y alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida
y da luz a los ojos. R/.
V/. La voluntad del Señor es
pura
y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son
verdaderos
y enteramente justos. R/.
V/. Que te agraden las
palabras de mi boca,
y llegue a tu presencia
el meditar de mi corazón,
Señor, roca mía, redentor mío.
R/.
Segunda Lectura
Lectura de la
primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (12,12-30):
Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno
y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser
muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo.
Pues todos nosotros, judíos y
griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para
formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu.
Pues el cuerpo no lo forma un
solo miembro sino muchos.
Si el pie dijera: «No soy
mano, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del
cuerpo? Si el oído dijera: «No soy ojo, luego no formo parte del cuerpo»,
¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el cuerpo entero fuera ojo, ¿cómo
oiría? Si el cuerpo entero fuera oído, ¿cómo olería? Pues bien, Dios distribuyó
el cuerpo y cada uno de los miembros como él quiso.
Si todos fueran un mismo
miembro, ¿dónde estaría el cuerpo?
Los miembros son muchos, es
verdad, pero el cuerpo es uno solo.
El ojo no puede decir a la
mano: «No te necesito»; y la cabeza no puede decir a los pies: «No os
necesito». Más aún, los miembros que parecen más débiles son más necesarios.
Los que nos parecen despreciables, los apreciamos más. Los menos decentes, los
tratamos con más decoro. Porque los miembros más decentes no lo necesitan.
Ahora bien, Dios organizó los
miembros del cuerpo dando mayor honor a los que menos valían.
Así, no hay divisiones en el
cuerpo, porque todos los miembros por igual se preocupan unos de otros.
Cuando un miembro sufre, todos
sufren con él; cuando un miembro es honrado, todos se felicitan.
Pues bien, vosotros sois el
cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro.
Y Dios os ha distribuido en la
Iglesia: en el primer puesto los apóstoles, en el segundo los profetas, en el
tercero los maestros, después vienen los milagros, luego el don de curar, la
beneficencia, el gobierno, la diversidad de lenguas.
¿Acaso son todos apóstoles? ¿O
todos son profetas? ¿O todos maestros? ¿O hacen todos milagros? ¿Tienen todos
don para curar? ¿Hablan todos en lenguas o todos las interpretan?
Palabra de Dios
Evangelio de hoy
Lectura del santo
evangelio según san Lucas (1,1-4;4,14-21):
Puesto que muchos han
emprendido la tarea de componer un relato de los hechos que se han cumplido
entre nosotros, como nos los transmiteron los que fueron desde el principio
testigos oculares y servidores de la palabra, también yo he resuelto
escribírtelos por su orden, después de investigarlo todo diligentemente desde
el principio, para que conozcas la solidez de las enseñanzas que has recibido.
En aquel tiempo, Jesús volvió
a Galilea con la fuerza del Espíritu; y su fama se extendió por toda la
comarca. Enseñaba en las sinagogas, y todos lo alababan.
Fue a Nazaret, donde se había
criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en
pie para hacer la lectura. Le entregaron el rollo del profeta Isaías y,
desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito:
«El Espíritu del Señor está
sobre mí,
porque él me ha ungido.
Me ha enviado a evangelizar a
los pobres,
a proclamar a los cautivos la
libertad,
y a los ciegos, la vista;
a poner en libertad a los
oprimidos;
a proclamar el año de gracia
del Señor».
Y, enrollando el rollo y
devolviéndolo al que lo ayudaba, se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos
clavados en él.
Y él comenzó a decirles:
«Hoy se ha cumplido esta
Escritura que acabáis de oír».
Palabra de Dios
¿ DÓNDE ESTÁ LA PALABRA?
¿DÓNDE ESTÁ LA PALABRA?
Casi me retrotrae a mi infancia cuando se leía o veía alguna película cuyo título era «en busca del tesoro». Y es que lo que se pierde o suprime, luego es difícil de recuperar o no se volverá a dar más. Hablar es entendernos, es la cualidad de este «animal racional» que no tienen otros parecidos a su especie. Lo hemos considerado un lujo, hemos rebuscado para que la misma palabra se pueda decir de formas diferentes, es lo que nos ha permitido – a parte del asombro inicial del ser humano por las cosas – avanzar en la humanidad. Y las palabras, de nuevo, tienen su sentido: humanidad, ser humano.
Pero no olvidemos que en la vida real las palabras tienen poder, tanto las habladas como las escritas. Las palabras escritas en unas instrucciones nos permiten montar o hacer funcionar algo; las palabras escritas en una receta de cocina nos permiten comer algo bueno y bien hecho. Y las palabras habladas también tienen poder: una información que nos cuentan, un insulto, algo bonito que nos dicen… hace que reaccionemos de diferentes formas. Y ese poder de las palabras aumenta si quien nos lo dice es alguien importante en nuestra vida.
Espero que no, pero pienso que estamos perdiendo la palabra. No tanto la palabra que es innata al ser humano, sino la capacidad de comunicación que nos ha hecho únicos, irrepetibles. Hemos luchado, y seguimos haciéndolo, para que la tecnología ayude al ser humano, para que ayude a avanzar... pero la tecnología ya nos supera y lo que es más, no nos da oportunidad de comunicación. Esa imagen tan llevada y traída de la mesa de cuatro de una familia, cada uno con su móvil, y que nadie habla, cada día es más real.
Ya no estrujamos la mente para enviar una felicitación (navideña, de cumpleaños, del día...), aprovechamos la que las redes sociales nos aportan para adjuntar sin necesidad de ser creativos en nuestras relaciones. Curiosamente el otro día fui a una farmacia a buscar un medicamento que el médico me dio por escrito en su receta y la farmaceútica me pregunta, «su médico no utiliza el ordenador». ¡Qué pena!, perdemos y no valoramos lo más esencial: la comunicación real y efectiva en favor de la maquinaria que, seguro, acabará con la identidad de muchos.
A nivel de fe, les puedo asegurar que «para el niño recién nacido no había sitio en la posada», o que «la Palabra vino a los suyos, y los suyos no la recibieron». El Papa ha querido que este tercer domingo sea dedicado a la Palabra y esta con mayúsculas. Dios sigue queriendonos decir algo. Todos los días, pero en especial los domingos, siempre tiene una buena noticia que comunicarnos en un mundo en el que cada vez, las malas noticias campan a sus anchas.
Quiero creer que la profecía se hizo evangelio: Hoy se ha cumplido la Escritura que acabamos de oír. Lo dice el Ungido, el enviado, el que es la Luz, el Camino, La verdad y la Vida. Lo dice el que es evangelio de los pobres. Fijémonos en nuestra asamblea. Podemos decir que somos una familia de hijos en torno a una mesa, de pobres que hemos sido evangelizados, de ciegos que hemos recobrado la vista, de leprosos que hemos sido limpiados, , de oprimidos que hemos sido liberados. ¡En Cristo Jesús, se ha cumplido para nosotros lo que el Señor, por el profeta, había prometido!.
Que nadie se engañe a sí mismo. O somos evangelio para los pobres, o no somos cuerpo de Cristo. O somos evangelio para los esclavos de nuestro tiempo, o no somos cuerpo de Cristo. O somos evangelio para los sin papeles, para los sin derechos, para los excluidos del bienestar, para los hambrientos de justicia, para los hambrientos de pan o no somos cuerpo de Cristo. En el Cuerpo de Cristo no caben los que, en nombre de la propia tranquilidad o seguridad o bienestar, justifican el abandono de los pobres y su muerte.
Comenzaba diciendo, ¿dónde está la palabra?. Pues la Palabra se hizo carne y acampó entre nosotros.
Hasta la próxima
Paco Mira
martes, 21 de enero de 2025
domingo, 19 de enero de 2025
JORNADA MISIONERA
🩷🩷En la mañana de hoy se ha realizado la jornada de infancia misionera en la unidad pastoral San Rafael Arcangel@ San Pedro Mártir.
💗💗A las 10.00 de la mañana se inició la eucaristía en la parroquia San Pedro Mártir con las familias y niños de esa parroquia. Al finalizar estos niños leyeron un “manifiesto” y se acogió a las familias y niños de San Rafael que se acercaron a dicho lugar para iniciar la marcha desde dicho lugar.
🥾🥾🥾La marcha se realizó por toda la Avenida llegando hasta plaza San Rafael con parada en la plaza los Algodoneros.
💒💒Al llegar a la plaza San Rafael se concluyó el acto con otra lectura por parte de los niños de esta parroquia dando lugar a la eucaristía en familia para dicha comunidad.
Muchas felicidades y muchas gracias por ser acogidos, por acoger y demostrar “”COMPARTO LO QUE TENGO”.
sábado, 18 de enero de 2025
viernes, 17 de enero de 2025
¿LA VIDA SIGUE IGUAL?
¿LA VIDA SIGUE IGUAL?
Julio Iglesias cantaba y decía, “unos que nacen, otros morirán. Unos que ríen otros llorarán, penas y glorias, guerras y paz” y detrás de cada estrofa se termina diciendo, la vida sigue igual. A estas alturas del mes de enero, ese podría ser el sentimiento de muchos: la vida sigue igual. El domindo pasado, sin haberse terminado la Navidad, ya no había demasiado espíritu navideño. Hemos vuelto a la normalidad con sus problemas y quebraderos de cabeza.
Y probablemente sea verdad que la vida sigue igual, porque los que tenemos en nuestras manos la posibilidad de que eso no sea así, nosotros, no nos ponemos manos a la obra. Quizás, como en las bodas de Caná, nos falte el vino, nos falte la chispa que encienda una llama que anime a que esto cambie; nos falte esa dosis que haga que nuestras vidas dejen la rutina del agua de las tinajas, y apuntarnos a lo nuevo y diferente que pueda aportarnos el mensaje de Jesús. Dejar el Antiguo Testamento y apuntarnos, ya de una vez, al Nuevo Testamento.
En la sociedad de Jesús, el vino era el símbolo de la alegría y del amor. Quizás en nuestra vida nos falten esos dos ingredientes que son los que dan su parte significativa a todo lo que hacemos y realizamos. Jesús no nos abandona e interviene para salvar la fiesta, proporcionando abundante vino y además de calidad. Jesús está con los problemas del pueblo, y además se dedica a hacer más humana y llevadera la vida de la gente.
Hoy es el día de la infancia misionera. Para evangelizar no solamente hacen falta las palabras, sino los gestos, los signos. Evangelizar no es solo hablar, predicar o enseñar. Es necesario actualizar, con fidelidad creativa, los signos que Jesús hacía para introducir la alegría de Dios haciendo mejor nuestra vida.
A muchos contemporáneos la palabra de la Iglesia los deja indiferentes. Nuestras celebraciones los aburren. Necesitan conocer más signos cercanos y amistosos por parte de nosotros para descubrir en los cristianos la capacidad de Jesús para aliviar el sufrimiento y la dureza de la vida. Jesús es esperado por muchos como una fuerza y un estímulo para existir, y un camino para vivir de manera más sensata y gozosa. El amor es el vino de la vida. Un vino que probablemente empieza a escasear y sin ese vino es posible la verdadera alegría entre los hombres.
Los niños han de ser los primeros evangelizadores y evangelizados. En algún tiempo había que ir lejos para evangelizar porque entendíamos que nuestro querido primer mundo estaba sobrado de acogida de la buena noticia. Me da la impresión que hoy es al revés: aquellos países que consideramos el tercer mundo, nos dan lecciones de escucha y puesta en práctica de la Palabra de Dios. Los niños, como las esponjas, acogen, absorven el mensaje y seguro que a sus amigos les pueden contagiar la alegría de la fe.
Cada uno tenemos que saber ubicarnos, no solamente en la vida, sino en la actividad pastoral que nos toca. Corremos el riesgo, ante la escasez de gente, que uno o más de uno haga todo de todo, con el riesgo de que el que mucho abarca, poco aprieta. Pablo en la carta que dirige a la comunidad de Corinto lo deja bien claro: que cada uno haga aquello a lo que ha sido llamado o a lo que se siente llamado. No haga aquello que no entiende, puesto que el ejemplo negativo puede ser peor.
Tenemos un reto por delante: anunciar a los niños que ellos pueden ser los primeros evangelizadores. Que lo niños vean en nosotros que también anunciamos la buena noticia; que, como el vino, nos inunde la ilusión y la esperanza de que las cosas pueden ir a mejor.
Hasta la próxima
Paco Mira
EUCARISTÍA II DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Lecturas
del II Domingo del Tiempo Ordinario
Primera Lectura
Lectura del libro de Isaías (62,1-5):
Por amor a Sión no callaré,
por amor de Jerusalén no descansaré,
hasta que rompa la aurora de su justicia,
y su salvación llamee como antorcha.
Los pueblos verán tu justicia,
y los reyes tu gloria;
te pondrán un nombre nuevo,
pronunciado por la boca del Señor.
Serás corona fúlgida en la mano del Señor
y diadema real en la palma de tu Dios.
Ya no te llamarán «Abandonada»,
ni a tu tierra «Devastada»;
a ti te llamarán «Mi predilecta»,
y a tu tierra «Desposada»,
porque el Señor te prefiere a ti,
y tu tierra tendrá un esposo.
Como un joven se desposa con una doncella,
así te desposan tus constructores.
Como se regocija el marido con su esposa,
se regocija tu Dios contigo.
Palabra de Dios
Salmo
Sal 95,1-2a.2b-3.7-8a.9-10a.c
R/. Contad
las maravillas del Señor a todas las naciones.
V/. Cantad al Señor un cántico
nuevo,
cantad al Señor, toda la tierra;
cantad al Señor, bendecid su nombre. R/.
V/. Proclamad día tras día su
victoria.
Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones. R/.
V/. Familias de los pueblos,
aclamad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor. R/.
V/. Postraos ante el Señor en el
atrio sagrado,
tiemble en su presencia la tierra toda.
Decid a los pueblos: «El Señor es rey:
él gobierna a los pueblos rectamente». R/.
Segunda Lectura
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo
a los Corintios (12,4-11):
Hermanos:
Hay diversidad de carismas, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de
ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de actuaciones, pero un
mismo Dios que obra todo en todos.
Pero a cada cual se le otorga la manifestación del Espíritu para el bien común.
Y así uno recibe del Espíritu el hablar con sabiduría; otro, el hablar con
inteligencia, según el mismo Espíritu. Hay quien, por el mismo Espíritu, recibe
el don de la fe; y otro, por el mismo Espíritu, don de curar. A éste le ha
concedido hacer milagros; a aquél, profetizar. A otro, distinguir los buenos y
malos espíritus. A uno, la diversidad de lenguas; a otro, el don de
interpretarlas.
El mismo y único Espíritu obra todo esto, repartiendo a cada uno en particular
como él quiere.
Palabra de Dios
Evangelio de hoy
Lectura del santo evangelio segun san Juan
(2,1-11):
EN aquel tiempo, había una boda en
Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. Jesús y sus discípulos
estaban también invitados a la boda.
Faltó el vino, y la madre de Jesús le dice:
«No tienen vino».
Jesús le dice:
«Mujer, ¿qué tengo yo que ver contigo? Todavía no ha llegado mi hora».
Su madre dice a los sirvientes:
«Haced lo que él os diga».
Había allí colocadas seis tinajas de piedra, para las purificaciones de los
judíos, de unos cien litros cada una.
Jesús les dice:
«Llenad las tinajas de agua».
Y las llenaron hasta arriba.
Entonces les dice:
«Sacad ahora y llevadlo al mayordomo».
Ellos se lo llevaron.
El mayordomo probó el agua convertida en vino sin saber de dónde venía (los
sirvientes sí lo sabían, pues habían sacado el agua), y entonces llama al
esposo y le dice:
«Todo el mundo pone primero el vino bueno y, cuando ya están bebidos, el peor;
tú, en cambio, has guardado el vino bueno hasta ahora».
Este fue el primero de los signos que Jesús realizó en Caná de Galilea; así
manifestó su gloria y sus discípulos creyeron en él.
Palabra
de Dios