viernes, 28 de septiembre de 2018

LA SOCIEDAD DEL ESCÁNDALO

LA SOCIEDAD DEL ESCÁNDALO
 carta


Los que me conocen saben que me gusta leer el periódico. Probablemente leo más las grandes letras que la menudencia que rellena hojas y que el final hacen que la prensa, al menos la escrita, sea cada vez más barata. Ahora con las nuevas tecnologías probablemente el papel va a tender a quedar para el recuerdo o la galería del coleccionista y con el paso de los años volverá a su color amarillo que la edad le va asignando.
No hace mucho un sociólogo norteamericano - quizás no podría ser otro - escribía que estamos en la sociedad del escándalo. Escándalo en todos los órdenes de la vida: social (a la gente le da igual lo que los demás puedan decir de uno en función de lo que haga o diga); escándalo económico( no tenemos escrúpulos en quedarnos con el dinero de otros y si es para enriquecimiento personal pues mejor que mejor); escándalo religioso (los casos de pederastia que últimamente han hecho tambalear los cimientos de nuestra iglesia, así lo atestiguan); escándalo cibernético (nos da igual el contenido de las páginas de internet e incluso nos da igual quien pueda acceder a dichas páginas), escándalo amoroso ( ya el valor de lo sincero en nuestras relaciones va a quedar relegado a un segundo plano y probablemente prime más el valor del yo por encima del nosotros); escándalo literario (¡ pues anda que no salen plagios ultimamente) etc.... y así seguía enumerando los escándalos que en nuestro mundo iban surgiendo. Pero lo más que me llamó la atención es que él llegaba a la conclusión y ahí el preligro: que nos estamos acostumbrando al escándalo. Ya éste forma parte de nuestras vidas y es uno más de nuestra familia. Cuando no hay escándalo, nos falta algo y, además, ya lo cantaba Raphael: " escándalo, es un escándalo"
Este fin de semana, Jesús (Marcos 9) nos habla también del escándalo. Pero con un matiz: rueda de molino al cuello y arrojo al mar. La piedra probablemente es por si uno sabe nadar y sale a flote. Quizás, Newmann, es decir el sociólogo que mencioné antes, se le olvidó lo de la piedra.
Creo que soñar un mundo mejor y atreverse a gestarlo con la colaboración de todos no tiene dueño. Todas las personas e instituciones de buena voluntad caben en el equipo de trabajadores por la vida. Todo esfuerzo es bien acogido... quien no está contra nosotros está a favor nuestro, le va a decir Jesús a sus amigos. La diversidad es una riqueza. Nuestra mirada sobre la vida y la historia están por esta labor, no somos nadie para censurar y apartar. Al contrario, en el diálogo constructivo y la colaboración con otros, encontramos nueva fuerza que hacen que el impacto en favor de los últimos crezca.
Con humildad tenemos que reconocer y pedir perdón por los tropiezos que hemos puesto a muchas personas para acercarse a Jesús. La vida de muchos de los que nos consideramos cristianos de fe con acuse de recibo puede considerarse escandalosa y por ello tenemos que pedir perdón y
reconocer con humildad que no lo hemos hecho bien. Los bienes y los lujos que restan credibilidad a nuestro anuncio de una vida austera; el afán de poder de no pocos de nosotros. La división entre sectores entre nosotros como hermanos que llega a poner en tela de juicio la autoridad de nuestro hermano mayor en la tierra el Papa Francisco; en definitiva todo aquello que ensombrece el anuncio limpio y sincero de un mensaje que merece la pena, por el que damos gracias y llamamos evangelio.
No tomemos al pie de la letra las palabras de Jesús: que nos cortemos una mano si pecamos, que nos pongan ruedas de molino.... pero sí que nos tenemos que plantear hasta qué punto nuestra palabra es acorde a nuestros gestos, sobre todo a la hora de dar testimonio de nuestra fe. Probablemente muchos seguirán a Jesús o no en función de nuestra vida.
Les recuerdo que entramos en Octubre.
Hasta la próxima semana
Paco Mira

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu opinión es importante.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.