CONOCIDO DE TODOS. RAYCO ES UN SEMINARISTA QUE ESTE CURSO VA A ESTAR CON NOSOTROS EN NUESTRA PARROQUIA. DESDE AQUÍ SE LE HA INVITADO A QUE NOS CUENTE UN POCO SU EXPERIENCIA DE FE Y COMO HA LLEGADO AL SEMINARIO.
ESTAMOS ENCANTADOS DE PODER CONTAR CONTIGO Y GRACIAS POR TU CARTA.
Soy Rayco Sarmiento Santana, vengo de Valleseco, tengo 22 años. Durante el próximo curso al menos
ESTAMOS ENCANTADOS DE PODER CONTAR CONTIGO Y GRACIAS POR TU CARTA.
Soy Rayco Sarmiento Santana, vengo de Valleseco, tengo 22 años. Durante el próximo curso al menos
Mi historia
vocacional comienza desde muy pequeño. Desde bien pronto sé que el Señor me ha
estado llamando y preparando, aunque yo no lo viera.
He frecuentado
la iglesia desde pequeño gracias a mis abuelos, que viven conmigo. Desde
pequeño estuve de monaguillo, lo que me daba un contacto directo y cercano a
ese misterio tan grande que veneramos los cristianos. En aquellos momentos de
niñez y juventud yo apenas me enteraba pero sé que así era.
Llega la
adolescencia y las preguntas normales de la edad. Yo me planteo dejar la
iglesia porque no le veía sentido, una pérdida de tiempo. Es el momento en el
que en mi parroquia se produce un cambio de sacerdote. Llega un sacerdote mucho
más abierto y simpático. El me enseña lo que es verdaderamente ser cristiano y por
su estilo de vida, sin muchas palabras, como vive el sacerdocio.
Él me invito a
algunas experiencias con otros jóvenes, como los encuentros diocesanos de
jóvenes, en los que ir profundizando en ese tesorito de la fe que poco a poco
iba descubriendo.
Luego de esto,
comenzaron dos años de búsqueda profunda. Coincidió el tiempo en el que
empezaba a salir con amigos con bastante frecuencia, y mi primer contacto con
el seminario a partir de las caminatas que se ofertan desde el mismo. Dos años
en los que viví distintas experiencias en las que fui probando qué ambiente era
el mío, donde me sentía más cómodo y más realizado. Entre estas experiencias fue
la de los cursillos de cristiandad la que más hondo caló y donde el sacerdote
que los acompañaba me planteo directamente la posibilidad del sacerdocio.
Pasados unos meses empecé a planteármelo en serio, ya que hasta entonces iba al
seminario por ir. Me puse en manos de un sacerdote que me acompañaba y comencé a
integrarme más activamente en la parroquia.
Pasados esos
años entré al Seminario, donde llevo dos cursos. Mi experiencia por ahora es
muy grata. Voy dando pasitos, el señor me va exigiendo un poquito día a día
para que pueda crecer y ser mejor persona. Él me da mucho más día a día de lo
que yo podre darle nunca; pero aun así el me anima, lo siento fuertemente en la
oración.
Animo Rayco tu puedes con esfuerzo y oracion veras q ueDios esta contigo
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